Miércoles de la tercera semana de Adviento

December 16, 2020

Unos minutos con Dios

Empezamos la oración de la mañana: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Lee y medita la Palabra de Dios. Si es necesario, léala de nuevo usando tu propia Biblia: Evangelio según Lucas 7, 19-23 En aquel tiempo, Juan envió a dos de sus discípulos a preguntar a Jesús: “¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?” Cuando llegaron a donde estaba Jesús, le dijeron: “Juan el Bautista nos ha mandado a preguntarte si eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro”. En aquel momento, Jesús curó a muchos de varias enfermedades y dolencias y de espíritus malignos, y a muchos ciegos les concedió la vista. Después contestó a los enviados: “Vayan a contarle a Juan lo que han visto y oído: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncia el Evangelio. Dichoso el que no se escandalice de mí”. Oración: dedica unos minutos a tener un diálogo espontáneo con Cristo de corazón a Corazón; intercede por tu familia… Señor, mi corazón se alegra tanto de saber que la Navidad está cerca! Con tu Encarnación me vienes a recordar la verdad fundamental de mi fe: ¡Dios me ama! Ayúdame a dedicarme con la oración y el celo ardiente de la alegría del Evangelio y transmitir esta hermosa realidad que a todas las personas, especialmente a aquellos miembros de mi familia que se han olvidado del verdadero sentido del Adviento, como camino de preparación a tu encuentro. Contempla la Palabra de Dios (en silencio, deja actuar en ti al Espíritu de Dios). Actúa y conserva la Palabra en tu vida hoy.  Repite con frecuencia y vive hoy la Palabra: «Volveos a mí y os salvaréis» (Isaís 45,22).

Padre Nuestro, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu Voluntad, así en la tierra como en el cielo.

Dános hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén

Para las lecturas del día, por favor vaya aquí.

Para Lectura Espiritual

La palabra evangélica me presenta hoy al Bautista como testigo de Cristo con su vida. En Juan se me presenta la figura del verdadero pobre declarado dichoso por Jesús, el creyente que camina en la paciencia y sabe corregir las propias apreciaciones de la espera según el estilo imprevisible del venir de Dios. Por esta razón, puede ahondar en su propia esperanza hasta el testimonio supremo. De la figura evangélica del Bautista también aprendo que la fe más fuerte y sincera puede coexistir con la duda y que sólo hay un modo para vencer esta duda que atenaza el corazón. Juan me recuerda que sólo puedo superar la prueba con la oración: renunciando a poner en tela de juicio la promesa de Dios y revisando mis limitados modos de comprender la promesa divina y de esperar su cumplimiento, ahí es donde encuentro la paz.

Latest Posts

Martes de la VI semana de Pascua

"les conviene que me vaya"
May 27, 2025

Memoria de San Felipe Neri, presbítero

"él dará testimonio de mí y ustedes también darán testimonio."
May 26, 2025

VI Domingo de Pascua

"La paz les dejo, mi paz les doy."
May 25, 2025

Sábado de la V semana de Pascua

Si el mundo los odia, sepan que me ha odiado a mí antes que a ustedes."
May 24, 2025

Viernes de la V semana de Pascua

"No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido"
May 23, 2025
Subscribe to Blog
Designed & Powered by On Fire Media |