Memoria de San Gregorio Magno, Papa y doctor de la Iglesia

Unos minutos con Dios

Empezamos la oración de la mañana en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Lee y medita la Palabra de Dios, si es necesario léala de nuevo, usando tu propia Biblia:

Evangelio según San Lucas 6, 1-5
Un sábado, Jesús iba atravesando unos sembrados y sus discípulos arrancaban espigas al pasar, las restregaban entre las manos y se comían los granos. Entonces unos fariseos les dijeron: “¿Por qué hacen lo que está prohibido hacer en sábado?”

Jesús les respondió: “¿Acaso no han leído lo que hizo David una vez que tenían hambre él y sus hombres? Entró en el templo y tomando los panes sagrados, que sólo los sacerdotes podían comer, comió de ellos y les dio también a sus hombres”.

Y añadió: “El Hijo del hombre también es dueño del sábado”.

Oración, dedica unos minutos a tener un diálogo espontáneo con Cristo, de corazón a Corazón, intercede por tu familia…….

¿Acaso no han leído lo que hizo David una vez que [tenía] …hambre? (Lucas 6:3)

Un autor escribió una vez que cuando era adolescente, había robado algo de comida porque era pobre y tenía hambre. Cuando fue a la Confesión, el sacerdote lo trató con compasión. Después de ofrecerle la absolución, le dijo al niño que él, el sacerdote, necesitaba arrepentirse por no satisfacer las necesidades del niño.

Contrasta la actitud de este sacerdote con la de los fariseos en el Evangelio de hoy. Los discípulos tenían hambre, pero estos líderes religiosos sólo podían ver que estaban violando el sábado. No había sentido de compasión. Jesús trató de reorientar su pensamiento recordándoles que el descanso del sábado se había roto en el pasado con el fin de proveer para David y sus compañeros (Lucas 6:3-4; ver 1 Samuel 21:2-7). Claramente, el llamado a satisfacer el hambre tiene prioridad sobre el llamado a descansar de todo trabajo en el séptimo día.

Probablemente podamos relacionarnos con la confusión o el sentido de indignación de estos fariseos cuando vemos a personas que no se comportan de la manera que creemos que deberían. Tal vez alguien no actúa o no se viste apropiadamente en la misa. Tal vez pensamos que alguien en el trabajo solo está haciendo alarde de las reglas. O tal vez otra persona expresa opiniones que van en contra de nuestros propios puntos de vista.

Cuando esto sucede, puede ser tentador volverse crítico y juzgar. Pero tal como lo hizo con esos fariseos, Jesús quiere reorientar nuestro pensamiento. En lugar de enfocarnos en lo que una persona dijo o hizo, nos invita a pensar en sus corazones. Podrían estar enfrentando preguntas difíciles de fe o lidiando con circunstancias desafiantes de la vida. No importa la razón, Jesús quiere que demos la bienvenida a todos y los tratemos como él lo haría.

¿Hay alguna persona cuyas acciones o comentarios te irritan o molestan? Hoy, pídele al Señor la gracia y la compasión para verlos con sus ojos. Tal vez él quiere que los acerques y los acompañes en su camino de fe. A medida que permitas que el Señor reoriente tu pensamiento, ¡incluso puede usarte para acercar a esa persona a él!

"Señor, ayúdame a tomar tu mente y corazón por todas las personas". Amén (Extracto de TWAU) Amén

Contempla la Palabra de Dios (en silencio deja actuar en ti al Espíritu de Dios). Actúa y conserva la Palabra en tu vida hoy.

Repite con frecuencia y vive hoy la Palabra: «Cerca está el Señor de los que lo invocan.» (Salmo 144) Amén

Acordaos, 
oh piadosísima Virgen María, 
que jamás se ha oído decir 
que ninguno de los que han acudido 
a tu protección, 
implorando tu asistencia 
y reclamando tu socorro, 
haya sido abandonado de ti. 
Animado con esta confianza, 
a ti también acudo, oh Madre, 
Virgen de las vírgenes, 
y aunque gimiendo 
bajo el peso de mis pecados, 
me atrevo a comparecer 
ante tu presencia soberana. 
No deseches mis humildes súplicas, 
oh Madre del Verbo divino, 
antes bien, escúchalas 
y acógelas benignamente. Amén.

Para el Evangelio del día oprime aquí.

Hoy más que nunca necesitamos orar por nuestros sacerdotes. Te invitamos a que adoptes a un sacerdote en tu oración personal y devociones diarias por un año. Para recibir el nombre del sacerdote oprime aquí.